A la hora de practicar barranquismo, uno de los factores que más afecta a la hora del descenso, es el caudal del agua que recorre el barranco a descender. El caudal es el responsable de que cada descenso que realicemos tenga un grado de compromiso, dificultad y exposición determinados en función de si hay un mayor o menor caudal de agua.

Hoy vamos a repasar algunos de los movimientos y técnicas más comunes en el barranquismo, y empezamos por algo tan fundamental como es la natación. Aunque casi siempre que nos enfrentemos a un barranco, las distancias en las que nadaremos no serán largas en demasía, es importante tener un buen nivel de natación y contar con que el neopreno nos ayudará a flotar un poco.

Cuando estemos en aguas tranquilas, recomendamos nadar de espaldas aprovechando la flotabilidad del neopreno y la mochila. Si por el contrario las aguas son bravas, avanzaremos con los pies por delante (excepto en los rápidos).

A lo largo del cauce, veremos que hay zonas en las que deberemos saltar por necesidad y otras en las que lo haremos por pura diversión. El protocolo a seguir a la hora de saltar será buscar un buen punto de apoyo previo tras asegurarnos que la recepción está limpia. Seguidamente, adoptaremos una posición perpendicular al agua, con los brazos y piernas pegados. Si saltamos desde alturas superiores a 5 metros, recomendamos saltar con los brazos abiertos y juntarlos segundos antes de entrar al agua.

Por último, dependiendo del caudal del barranco, encontraremos más o menos paredes que deberemos descender mediante la técnica del rápel. Aquí nos guiaremos por la técnica más adecuada dependiendo de la altura, pero siempre lo realizaremos de cara a la reunión de la cuerda y con los pies planos sobre la pared. Con la mano que mejor controlemos, agarraremos la cuerda controlando la velocidad de bajada y las frenadas.

Desde ETEVA os invitamos a descubrir un deporte en el que conocer el mundo de la espeleología de manera diferente y vivir sensaciones únicas, siempre mirando por la máxima seguridad a la hora de realizarlo.